noviembre 27, 2023
Eran las 2:30 p.m y tenía que estar en aquella cita a las 3:00 p.m. Como si pudiera leer mi afán, mi pequeño de 21 meses se empeñaba en hacer todo más lento de lo normal (o eso me decía erróneamente mi interpretación). No cesaba de pedirme "nutritivo", como suele llamar a mis pechos, y tiraba con fuerza de mi blusa para lograr su cometido...